domingo, enero 29, 2012

lo desenfocado puede esperar

Un día luminoso. La familia es feliz. El padre conduce orgulloso. La madre sonríe satisfecha. El niño es el único que parece ver el peligro que acecha.


Ahora también es la madre, aunque parece no tomárselo muy en serio, la que percibe algo. Las sombras se ciernen sobre el cristal trasero, que ahora nos muestra una carretera donde antes podíamos ver un cielo iluminado. Parecen sombras de cipreses, sin duda un mensaje del director. A todo ello, el padre continúa su conducción orgullosa de mierda. Empezamos a sospechar de él.


Entonces un disparo. Algo muy delicado. Una bala finísima y silenciosa que atraviesa la luna delantera y acaba incrustada en el cuerpo del niño. Ese desenfocar la imagen trágica, como queriendo decir: ya os imagináis lo que le ha pasado al niño. La madre se gira alarmada. El padre, en cambio, no se molesta en lo que le pueda pasar o no a su hijo y se centra en la grieta en el cristal. Este gesto nos puede ayudar a saber algo más sobre él: quizá no es el padre del niño. Pensemos en ello.



Mientras el niño sigue agonizando (su color pálido y la boca abierta lo delatan) con la bala clavada no sabemos dónde, el padre se muestra preocupado, turbado, fastidiado, no por esa agonía de ese crío del asiento trasero sino por todas las molestias que le pueda causar este incidente y, sobre todo, el dinero, el dinero, coño. Cuánto costará el arreglo. Y no hablamos de la posible operación a corazón abierto del niño, hablamos de la luna delantera. Lo realmente importante aquí es lo enfocado, lo nítido. Lo desenfocado puede esperar.



Ya vuelta a la normalidad. Un día nuevo (la ropa) pero igual de luminoso. La luna delantera arreglada, de ahí la sonrisa odiosa del padre. Vuelve el cielo claro tras la ventana trasera. Nada de sombras en la carretera. Vuelven las sonrisas. El padre no mira a cámara. Sigue sin ser alguien de fiar. El niño parece recuperado. Aunque eso es algo que sólo la madre sabe.



sábado, enero 28, 2012

éxtasis


La cosa empezó así.

Puede que para muchos de nosotros, hablo de mí pero te incluyo, sin ni siquiera ser conscientes, la vida nos empezase a finales del s.XIX en un paraje cercano a París.

Aquí podríamos decir que empezó mi vida, lo creas o no.

Qué extraño todo, te dirás.
Y digo la vida, no digo cualquier cosa.
Porque fue entonces cuando Debussy y su Arabesque nº1 lo iluminan todo, y los cinco minutos te hacen florecer.

Luego está Isao Tomita quien, casi un siglo después e influenciado por Wendy Carlos, se dispone a sintetizar obras clásicas. Entre ellas algunas piezas de Debussy, que incluye en un disco titulado Snowflakes are dancing (1974).

Sintetizando el Impresionismo con soltura

Francia, Japón.

Nueve años después, en 1983, nuestra tele emite por primera vez un programa que me sacude por dentro, como si yo, un niño de cinco años, pudiera entender lo que significa eso.
Aquella sacudida me recorre el cuerpo como el éxtasis a Santa Teresa.
Son las imágenes, es todo aquel mundo onírico, todas aquellas referencias culturales, qué sabíamos nosotros lo que era aquello, ese vanguardismo pero, sobre todo, la sintonía de la cabecera.
Quizá me entiendes, quizá no, lo único que quería decirte es que, al cabo de los años, no recordamos días sino momentos.
Y Arabesque nº1 interpretado por Isao Tomita siempre me conducirá al mismo momento.
Ese momento que vives sin darte cuenta y que pasa fugaz,
un destello en una tarde infantil,
pero que viene a tu memoria una y otra vez,
como queriendo explicarte

algo

algo que se te pasó por alto.



viernes, enero 27, 2012

no la he visto

The WhatsApp Chronicles.
Season 1. Episode 1

Tomás (en línea):
Por cierto, ¿conoces la filmografía de Fassbinder y Béla Tarr?

Diego (en línea):
Soy un experto.
No, no he visto nada.

Tomás (en línea):
Mira el tráiler de Turin Horse, de Béla Tarr.

Diego (en línea):
Ok.

Tomás (en línea):
Yo no la he visto, no sé qué me parece.

lunes, enero 23, 2012

sombras

Te das cuenta
cómo se alargan

ya

los días.

Poco a poco
las sombras,
cómo se alargan.

domingo, enero 22, 2012

inminente

Diego A. Manrique reseña en El País un libro de lo más interesante. A priori.
Si, como bien he tenido que buscar en el diccionario, inminente significa "que amenaza o está para suceder prontamente", entonces quiere decir que el libro, Veneno en dosis camufladas: la censura en los discos pop durante el franquismo, todavía no está a la venta.
Ni siquiera en la web de la editorial parecen tenerlo en cuenta.

A ver si todo ha sido un sueño del Manrique.
Un crítico que sueña con libros que no existen, escribe la reseña al despertarse y, al cabo de un tiempo, ese libro aparece en las librerías.
Acaso no sería bonito.
Acaso no es lo que necesitamos.
Que nuestros sueños se cumplan.

Pregunto.

sábado, enero 21, 2012

como de otro mundo

El estreno de una película de David Fincher es más noticia por los títulos de crédito que por la peli en sí. Al menos yo sólo quiero ver, sólo me interesan, los títulos de crédito de Fincher.
Hace unas semanas se estrenó (había escrito llegaba a las pantallas, para no repetir estreno, herencia de los cursos de escritura, siempre puliéndolo todo) la primera parte de la serie Millenium, y sus títulos de crédito hicieron desabrocharse el pantalón a más de uno y de una.
Llegué a leer que eran eternos. Creo que fue el director Rodrigo Cortés en Twitter. Quizá me equivoco.
La verdad es que no están mal (no están mal, digo. El otro día vi el inicio de Yo soy la Juani, sus títulos de crédito, y pensé en Fincher).
Joder, qué voy a decir, son una puta obra maestra, una maravilla como de otro mundo. Qué mente produce estas imágenes. Hay muchas influencias que no puedo reconocer porque no las conozco pero también porque hay algo nuevo en ellas. Algo nuevo, mierda, cuántas veces puedes decir esto tratándose de arte.
Y luego está la revisión de Inmigrant song de Led Zeppelin pasada por el manto tenebroso de Trent Reznor. Entonces ya apaga y vámonos.
(Mientras escribo esto, ahora mismo, el nuevo anuncio de Estrella en la tele. Sabes de qué te estoy hablando. De esa sensación, de esa empatía con los asesinos de masas. Sabes de qué te estoy hablando.)

Aquí te lo dejo.



Luego están estos otros que también me gustan de él.
Siempre esa oscuridad interior, el desasosiego que transmiten.
Los de Seven sí que son eternos.






sábado, enero 07, 2012

luck is an attitude (fuck yeah)



el de la izquierda

Por si por un casual quieres saber más sobre mí: soy el de la izquierda.

Y no hay nada que hacer.

Desgraciadamente, estoy de acuerdo: luck is an attitude.

Por otro lado: odio al de la derecha.

jueves, enero 05, 2012

bendecir

Títulos de películas pronunciados en la película.
Una tontería como cualquier otra para bendecir este año.