Descubrí a Jimi Hendrix cuando iba a séptimo de E.G.B. o, lo que es lo mismo, cuando tenía, ¿qué edad se tiene en séptimo?, once doce años, ¿no? ni idea, era en séptimo, eso sí, porque recuerdo la clase y trozos de mi vida y cosas de séptimo, pero no me hagas decir la edad que tenía, sería en el 1990, doce años, ya está.
Estaba viendo y grabando un resumen del año del Sputnik, un buen programa copy and paste de la tele catalana que ofrecía conciertos y documentales sobre diferentes artistas musicales. Cuando eres pequeño piensas que son los mejores. Luego descubres Inglaterra y la BBC.
La cuestión es que estaba viendo mientras grababa el Sputnik, cuando aparece un negraco despeinado, en blanco y negro, vestido como un Beatle en la portada del Sgt. Pepper's y sonriendo mientras toca, como quien acaricia el culo de su pareja después de follar.
(Inciso: ¿Quién ha sido el inventor del Toblerone? ¿A alguien le parece cómodo partirlo? ¿Qué mierda es esta, señor Toblerone? No hacían falta esas pirámides, con hacer onzas cuadradas y planas ya valía.)
Pues el nigga sonriente toca Purple Haze, según el subtítulo del Sputnik.
Noel Redding al bajo y Mitch Mitchell a la batería le acompañan, aunque estos nombres los conocería más adelante. A mí ahora sólo me interesaba el Hendrix.
Quizá la semana siguiente fui en busca de algún cd de Jimi Hendrix que contuviera Purple Haze.
Es una extraña manía, ¿no? Escuchas una canción, incluso tienes ya esa canción, en alguna recopilación o lo que sea y, como te gusta, buscas un cd del artista/grupo pero, a ser posible, que contenga esa canción que ya tienes, como diciendo "al menos si las demás no me gustan, sé que la que conozco me va a gustar" o, "si esa canción me gusta y está en este cd, eso quiere decir que el resto me gustarán".
Uy. Delicado asunto.
Al final me compré un cd titulado Kiss the sky, una recopilación donde aparecía Purple Haze y otras tantas.
Que al principio me parecieron una basura.
Mi primera impresión de Jimi Hendrix a través de unos auriculares de compact disc fue un auténtico desastre.
El disco empezaba con un tema llamado Are you experience?
Recuerdo que me lo puse antes de cenar, pero sólo como quien comprueba que funcione.
Y entonces empecé a escuchar unos sonidos extraños. ¿Cómo? Miré el segundero del compact, por si el cd estaba rallado, comprobé los auriculares porque el sonido me iba del derecho al izquierdo y me estaba volviendo loco y sólo llevaba cuatro segundos escuchando al Hendrix.
Lo paré.
Me dije que quizá después de cenar lo vería todo de otra manera.
Pero después de cenar ni lo intenté. Pasé los números hasta llegar a Purple Haze, la escuché tres o cuatro veces y me fui a dormir.
No sé cuánto tiempo estuve sin escuchar esa primera canción, la saltaba siempre, empezaba a escuchar las demás pero Are you experience? me parecía horrorosa.
Me encantó I don't live today en directo; también Red house, un blues perfecto; Voodoo Child y Crosstown traffic se convirtieron, junto a Purple Haze, en mis preferidas; más tarde empecé a entrar en la psicodélica de Third stone from the sun.
Y así acabé escuchando todo el disco.
Excepto la primera canción, que me seguía pareciendo una tomadura de pelo.
Años más tarde me compré el álbum Are you experience? y fue allí donde la escuché por primera vez de principio a fin.
Era la última canción del álbum al que daba título.
¿Por qué Jimi Hendrix había colocado esa canción la última?
Y, ¿por qué alguien fabricó una recopilación poniéndola en primer lugar?
El arte debe tener un orden, el impuesto por el artista.
La frase: "Pollock tiró un chorro de pintura blanca, luego uno azul y, por último, uno marrón".
No es la misma que: "Pollock tiró un chorro de pintura azul, luego uno marrón y, por último, otro blanco".
Son cuadros distintos.
Simplemente si has hecho alguna recopilación para alguien, te habrás dado cuenta de la importancia del orden.
¿Por qué empezar con esta y luego seguir con esa y al final acabar con esa otra y no al revés?
Porque el orden es importante.
Y eso fue lo que me pasó.
Eso y el paso de los años.
Uno nunca es el mismo dos veces.
Entonces escuché Are you experience? allí, en su lugar, donde tenía que haber estado desde un principio, al final, y lo vi todo claro.
Quizá era su mejor tema y yo había estado años sin escucharlo.
Esos efectos iniciales y luego la explosión, una batería con redobles casi militares, el solo de guitarra sonando al revés hacia la mitad, cuando desaparece el resto de la banda, como si estuviera en otra dimensión.
Pero, sobre todo, lo que más me ha gustado a lo largo de los años, lo que me ha ido enamorando y no sé por qué, ha sido esa única nota repetida en el piano durante toda la canción.
1 comentario:
Buenisimo lo del toblerone. Lo que duele romperlo con los dedos. Yo ya voy con el cuchillo del pan y un golpe seco. Menudo listo el Sr. Toblerone.
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