martes, diciembre 23, 2008

grupo de esperpentos

De pequeño a mí me gustaba La Orquesta Mondragón.
No era algo que me quitase el sueño, ni siquiera fueron mi grupo favorito, pero reconozco que les tenía cariño, les tengo cariño. Para alguien de ocho, diez años, crecido a base de sábados ante la Bola de cristal, un grupo de esperpentos sol y nieve como fueron La Orquesta Mondragón era lo mejor que le podía pasar a la música, al mundo, así, en general.

De pequeño, otra vez empiezo la frase igual, fui a ver a La Orquesta Mondragón a un concierto gratuito durante unas fiestas aquí, en Viladecans. Fui con mis primos y no recuerdo con quién más. Sólo me acuerdo de que cuando nos íbamos, un chico estaba en el suelo y le temblaba el brazo y una chica le sujetaba la cabeza por la nuca y gritaba Una ambulancia mientras nosotros pasábamos por su lado y alguien dijo Sobredosis y yo supuse que era algo de drogas pero no entendí muy bien la escena, quizá por el contexto, quizá porque no había nada que entender.

De entre todos los éxitos ("Viaje con nosotros", "Ellos las prefieren gordas", "Caperucita feroz") siempre hubo uno que me gustó por encima de los demás, una canción "seria" entre tanto repertorio sin pretensiones.
"Corazón de neón" es una de las mejores canciones del pop español le pese a quien le pese.
Más tarde, años después, me enteré de que fue compuesta por Gurruchaga, Sabina y Antonio Carmona, cosa que me hizo gracia, más que nada porque me imaginé a los tres personajes, papel y lápiz en mano, whisky y porro en otra, polvo blanco por las mesas y pariendo un temazo como este.
A veces las drogas no van mal del todo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

UN TEMAZO SI SEÑOR! SE NOTA EL SELLO DEL MAESTRO SABINA.

UN SALUDO Y FELIZ NAVIDAD A TODOS!