domingo, agosto 08, 2010

¡catacrack!

7 comentarios:

Pol dijo...

Quiero entender que la has visto. ¿Qué te ha parecido? Y no me refiero, obviamente, a si te ha parecido que "la explicación" es esta o aquella, sino a si te ha parecido que merece o desmerece la pena. Porque yo, hasta ahora, siempre había encontrado merecedoras de una o varias penas, según la ocasión, a las pelis de este buen señor, sin embargo, con esta última peli suya no acabo de verlo del todo claro, la verdad.

diego dijo...

Querido Pol:

No sé qué extraña razón es la que provoca que no lo veas del todo claro.
Sin duda, si empiezas a leer blogs y webs y foros, lo más probable es que acabes empachado de tanta sabiduría técnica cinematográfica que hay esparcida por la red de redes, y que este empacho te haga dudar de tu propio saber, de tu propia intuición como ser letrado y avispado y cinéfilo, ese mismo ser, tú, que siempre había encontrado merecedoras de una o varias penas a las pelis del Nolan.
Piensa que muchos de los que se dedican a emitir juicios sobre una peli son los mismos que guardan capturas de Anna Simón en su escritorio para luego colgarlas en forocoches.

Con esto quiero decir:
1º- tu intuición ha sido buena hasta ahora.
Con esta peli va a salir reforzada.

2º- DiCaprio es uno de los mejores actores en la actualidad y eso viene dado por varios factores, de los que destacaremos dos: talento natural y sabia elección de papeles.

y, sobre todo, 3º- el Nolan es uno de los mejores guionistas vivos, y espero que viva muchos años más. Porque en esta peli no verás ni un pezón, ni media nalga, ni siquiera un sujetador marcado a través de la camiseta.
No los verás porque no hacen falta.
Aquí es el guión lo que te la pone dura.
(Llévate una chaqueta o una carpeta o algo para disimular la erección a la salida.)

Espero haberte sido de ayuda, aclarándote las posibles dudas que hayas podido ir acumulando en estos últimos días de indecisión.

Este blog está aquí para decir las cosas claras y para indicar el camino a seguir.
No el bueno, no el malo: el camino a seguir.

Ya me dirás qué te ha parecido y, recuerda, la chaqueta o la carpeta, o algo, llévate.

Un abrazo.

Pol dijo...

Redios, no conocía a la tal Simón. Tuve un profe, una vez, siendo yo chiquitico, que me llamaba Simón. Yo, recurriendo a Bukowski -porque, cuando las cosas se ponen jodidas, lo mejor es tirar de valores seguros- siempre le decía: "¡No me llames Simón, hijo de puta! ¡Yo me llamo Bandini! ¡Arturo Bandini!". Pero no había manera. A una compañera de clase, chiquitica ella, le llamaba Simoneta. En realidad se llamaba Susana. Lo de Simoneta, empero, sí estaba del todo justificado. Era una zorra de mucho cuidado, la Susana esa, toda chitiquica ella. En fin, divago.

Vamos a ver qué voy, vamos a ver qué voy. Creo que has deducido de mis primeras palabras que lo que no veo del todo claro es si ir o no ir a ver la peli, y no, eso lo tengo y he tenido claro, como no podía ser de otra forma, desde el buen principio: la vi el mismo viernes del estreno, con un colega, sesión de las 16:00, Yelmo Icària, frenada larga. Mi punto, pues, no tiene -o más bien tenía, si me dejas que te explique- nada que ver con los juicios emitidos en forocoches, pues, entre otras cosas, no me dedico a leerlos habitualmente ni tampoco me he dedicado a leerlos en esta ocasión en particular. No, verás, lo que yo no veía -nótese ya desde aquí el cambio en el tiempo verbal que rige la narración- claro era si esta peli estaba a la altura de las otras pelis -honor y gloria- de este buen señor. Y voy a explicarte porque no lo veía. Y también voy a explicarte justo después porque ya se me han disipado las dudas.

La peli la vi el viernes, como digo, con un colega. Al salir del cine anduvimos discutiendo largo rato acerca de, a raíz del plano final, si la cosa es un sueño o no es un sueño, you know what I mean. Y este fue un error craso. Un error craso que reconozco ahora, pero que, lento de mí, no reconocí entonces. Fue un error craso porque hizo que nos planteáramos la peli, compulsivamente además, desde esa perspectiva (de mierda) e impidió que nos tomáramos nuestro tiempo en dejar que el sofrito se hiciera como es debido -liturgia indispensable en tantos y tantos aspectos de esta vida nuestra- para poder saborearlo al punto correcto de sal y poder ser capaces de llegar a entender que habíamos entendido. Es debido a esto que he andado yo dándole vueltas a esta peli desde una perspectiva a través de la cual, para qué voy a engañarte, podían darle bien por el culo al buen señor Nolan y a sus putos tótems. De ahí mis dudas, mi temor, mi angustia. Pero no. Ni de puta broma, vamos.

Pol dijo...

La regla general dice que cuando las cosas no encajan de ninguna de las maneras, el error está en el planteamiento de base. Billy Wilder dijo que si tienes problemas en el tercer acto, es que en realidad tu problema está en el primero. Mi madre dice que el arroz, para ir bien, reposado. Fue anteayer que yo, siguiendo a vueltas con la peli, empecé a coger distancia y resolví, muy acertadamente, a mandar a mi colega y nuestras discusiones a tomar por el culo. Y, prácticamente al mismo tiempo, hice también otra cosa también muy acertada: empecé a plantearme esta película desde, sí, el ineludible plano final, pero, a diferencia de hasta ese momento, me concentré no en su parte final -tótem que gira, corte abrupto a negro-, sino en su parte inicial -Cobb que hace girar el tótem, Cobb que suda del tótem, Cobb que se va con la muchachada-. Empecé a pensar entonces, lento, ya digo, de mí, que si la historia de Cobb transcurre o no en un sueño a quién más debería importarle es al propio Cobb, pero, sin embargo, no parece que al final le importe demasiado. De hecho, se la suda olímpicamente. Así, resolví que a mí, ni que fuera durante un ratito de nada, iba a sudármela también. Y esta pequeña y acertada decisión hizo que, al fin, me replanteara la película entera sin esa puta rémora de ir rastreando todas las ambigüedades -y son un montón, te lo puedo asegurar- que la zorra de Nolan ha ido dejando a lo largo de toda la historia para que, a raíz de la parte final del plano final, se coma uno la cabecita propia. Y fue de esta manera que la película empezó a crecerme más, y a gustarme más, y, sobre todo, a encajarme muchísimo muchísimo más.

Finalmente, y ya para acabar, ayer mismo decidí volver al cine a ver la peli de nuevo, pero -pues como digo, es cuando las cosas se ponen jodidas que hay que tirar de valores seguros- esta vez yo solo. Y eso es lo que he hecho hace no mucho rato. Y heme aquí explicándote todo lo que te he explicado hasta ahora para poder pasar a explicarte, de aquí en adelante, con toda propiedad, que estoy mucho más de acuerdo contigo que conmigo mismo hace tres días. Que, sí, esta es una puta gran película, con, sí, un puto gran guión. Ahora mismo, veo a esta película como, y no es poco, una enorme y genial película de género (de género negro, siendo específico: de cine negro puro y genuino, de cine negro de verdad, con todas sus letras, tan negra como Laura, La mujer del cuadro, El sueño eterno o Retorno al pasado). Y que, si esta película es sueño o no lo es, lo es o deja de serlo del mismo modo que aquellas. Y que la boutade final no es más que eso, una boutade, pues lo importante no radica en si hay más evidencias que apunten al sueño o a la realidad, sino en que, para Cobb, desde el mismo momento que supera la aduana y entra en los USA, todo lo anterior ya no cuenta para nada. No es que no le importe si está en la realidad o no porque nada le importa más que poder recuperar a sus hijos, que puede que también, sino que todo lo que él había hecho hasta ese momento era con el único objetivo de poder llegar hasta allí y, una vez allí, ya no necesitará volver a hacerlo nunca más (de ahí que tampoco necesite nunca más su tótem). Vista ahora, ya digo, la película me parece muchísimo más redonda. El único punto en el que considero que falla el guión es en un detalle que diría viene causado por ese afán de Nolan por conseguir aunar lo bueno con lo espectacular (difícil tarea, todo sea dicho, que, para mí, él siempre había conseguido y -ahora ya sí- ha vuelto a conseguir de nuevo realizar muy bien). Y el detalle es: si la ingravidez a la que están sometidos en la furgoneta cuando ésta va cayendo hacia el agua provoca que el sueño del hotel transcurra en estado de ingravidez, ¿por qué la ingravidez a la que están sometidos en el hotel no provoca que el sueño de la nieve transcurra en estado de ingravidez? Después de todo este puto quilombo que te he explicado, y más feliz que unas pascuas, te digo que esta es la única cosa que creo que no encaja en el cojonudo guión de esta cojonuda película. Y ya.

Pol dijo...

Vale venga va, ni tanto ni tan poco: la peli tiene sus buenas virtudes, qué coño, pero, ¡pero qué coño!, también tiene sus buenos defectos. Sin desmerecer para nada al buen señor inglés este, diré que, aceptándola y disfrutándola de buen grado, todas sus películas anteriores que yo he podido ver (que, desde Following, son todas las que ha hecho) le sacan media, una o varias cabezas. Y ahora sí que sí, ya que ya, me retiro definitivamente a mis quehaceres.

houdini dijo...

Lo dire, no muchisimo mas claro que Pol, porque no se puede, pero si muchisimo mas brevemente.

- La vi el viernes.

y

- Que gran comedia futurista, no?

Me dio la risa floja en los momentos mas inadecuados. Bostece varias veces. Quiero decir:

- Inception = Matrix + Avatar + The Eternal Sunshine of the Spotless Mind. Ese deja vu del deja vu.

Pero bueno, tambien hay quien dice que a mi no me gusta el cine, y reconozco que despues del cortado de las tres, hasta yo misma me planteo si el cafe me gusta o no me gusta.

x

diego dijo...

Veo que este post se me ha ido de las manos. Con gente como vosotros este blog está perdido.
Ahora que ya había conseguido veintisiete seguidores.

Pol, sinceramente, tendría que ver de nuevo la peli para discutir los detalles que expones. Lo de la ingravidez, por ejemplo. Seguro que hay una explicación, no creo que a esas alturas del rodaje el Nolan dijera: ostia, déjalo así, aquí en la nieve pasamos de la mierda esa de la ingravidez, que se me hace muy lento todo, nena.
Por cierto, no sé qué técnica ha utilizado.

A mí lo que más me gustó es que, más allá de ingravideces, la peli no se aguantaría por ningún sitio sin las relaciones familiares, los sentimientos. Origen es una peli de sentimientos.
Ya lo podéis decir por ahí.
Mistakes and regrets.

Y a houdini, sólo decirle que faltan muchas tildes en su texto. No he podido entender nada de lo que quería (¿realmente quería?) explicar.
Sin embargo, decirle que, siempre que se decida a volar a estas tierras norafricanas, cuente conmigo y con Sheila para recogerla en el aeropuerto.
Somos gente de no hacer nada. Siempre estamos dispuestos.

Un abrazo a los dos tertulianos.
Hacéis grande este blog.