domingo, marzo 13, 2011

un buen profesor

Acabo de ver Senderos de gloria.
Te acuerdas que te dije que tenía ganas de volver a verla. Pues hoy ha sido el día.
Pensaba que la tenía, pero no. Me la compré el viernes en El Corte Inglés de Diagonal, por 8,95.
La acabo de ver quince años después.
El profe de Latín nos la puso un día. No me preguntes por qué. Creo que era para que viéramos los diferentes mandos del ejército y los comparáramos con los de la época romana.
Una excusa así nos dio.
De todas formas hoy, desde aquí, le agradezco esa decisión.
Ángel Castro se llamaba, se llama. Un buen profesor.
Ángel, si alguna vez entras en este blog después de buscarte en el Google, que sepas que te recuerdo con cariño.

Y quince años después he ido recordando algunas de las escenas que me gustaron y que me han vuelto a gustar.

Quince años después, no he podido dejar de emocionarme con la última escena.
Soldados franceses tarareando una canción alemana.
La música humanizando la barbárie.

No hay comentarios: