viernes, noviembre 24, 2006

nueve Rayuelas

Bien, después de este breve paréntesis onanísta convirtiendo este blog en un fotolog de un quinceañero que quiere ser aceptado, de no escribir ni una sola palabra durante varios días excepto nombres de actrices, de escuchar voces lejanas que me dicen que deje de subir fotos de tías, que eso es aburrido, después de todo esto, ha llegado la hora de seguir bajando a toda pastilla por esta espiral de sinsentidos varios en la que se ha convertido este blog con una nueva entrega de:

Algunas frases sueltas (vol.5)

Para hacerme el listillo y el pelota a la vez, le pregunto a mi profesor por alguna revista interesante de literatura. Me recomienda tres: para marujear y entretenerse el Qué leer, para leer buenas críticas de libros, Revista de libros, y para ajustarse las gafas de pasta con el índice mientras sonríes a la cajera, la revista Quimera.
Al salir de clase cojo unas gafas de pasta de General Óptica, les quito la alarma y me las llevo puestas, luego les quito los cristales apretando con el pulgar, click y click, voy a la Central del Raval, busco en la sección de revistas por la Q, encuentro la revista, la hojeo, ojeo a la cajera, ojeo más que hojeo, dejo caer un poco mis gafas para poder ajustármelas mientras pague, voy a pagar, la cajera no me mira, le doy el dinero (cinco euros vale), sigue sin mirarme, me da la revista en una bolsa, sigue sin mirarme, ¿qué tengo que comprarme para que me mires? ¿Rayuela otra vez? Nueve Rayuelas tengo ya, malditas cajeras arpías. Salgo a la calle y tiro las gafas en la primera papelera que encuentro. De la papelera cojo el suplemento Cultura/s de La Vanguardia que alguien me ha tenido la delicadeza de dejar. Me lo pienso y vuelvo a coger las gafas de pasta. Este suplemento debería regalarlas algún día. Como en una novela de Auster, el último artículo del suplemento habla sobre una web que vende, al precio de cien dólares, cajas con basura recogida en las calles de Nueva York. ¿Bufonada artística o negocio del siglo?, nos pregunta el artículo. Pues, para mí, más bien lo segundo. Pero un aplauso le doy, claro que sí.
Hojeo ya en casa la revista Quimera y creo conveniente recomendarla a todos vosotros, seres del inframundo que perdéis el tiempo leyendo este blog. Millones y millones de páginas web por descubrir y vosotros leéis ésta. La verdad es que os merecéis un trozo de cielo. No sé si podré, pero intentaré incluirlo en la recopilación, de la cual no me he olvidado.
Pues bien, antes de que se acabe noviembre, os recomiendo esta revista que este mes contiene un dossier de literatura y música más que interesante. Recomendable de verdad.

Nada más por hoy. Despedirme con cuatro palabras sacadas de El diccionario de Coll, libro que compraron mis padres allá por el 1976 y que leo cuando no leo Rayuela. Un libro que me hace sonreír con facilidad y olvidarme, aunque sea por unos minutos, de toda la cultura/s basura que nos rodea.

Galopar: pareja de franceses.
Pateo: que niega la existencia de Dios con los pies.
Demoño: diablo, espíritu del mal, con el pelo recogido en la parte posterior de la cabeza.
Cleptómono: el que roba simios de manera inconsciente e inevitable.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo de robar gafas de pasta en una tienda es una bajeza... no podrías haber ido al CD DROME y habérselas quitado a algún cliente?

(A mí me gustaban las fotos de chicas... y no tengo 15... joder, hace más de 10 años que tuve 15... joder... calfred)

g dijo...

welcome back (es a tu cerebro no a ti, por eso le hablo en inglés) y que conste que te admiro, porque si bien la calidad de Quimera es incuestionable a mi se me atraganta más o menos igual que el Babelia (leería ambas publicaciones si no hiciera nada más en la vida y me dedicara a cultivar mi erudición, pero yo me dedico a otros asuntos de mayor calado: libros que vendan a pares, que no que hagan pensar ni sean buenos -a ver que se van a creer los culturetas e intelectuales que al final son 3 gatos y casi no compran libros-.)

g dijo...

welcome back (es a tu cerebro no a ti, por eso le hablo en inglés) y que conste que te admiro, porque si bien la calidad de Quimera es incuestionable a mi se me atraganta más o menos igual que el Babelia (leería ambas publicaciones si no hiciera nada más en la vida y me dedicara a cultivar mi erudición, pero yo me dedico a otros asuntos de mayor calado: libros que vendan a pares, que no que hagan pensar ni sean buenos -a ver que se van a creer los culturetas e intelectuales que al final son 3 gatos y casi no compran libros-.)

g dijo...

vaya 2x1
mira que me han dicho que hablo mucho, ahora empezarán a decirme que me repito...

Anónimo dijo...

¿Malditas cajeras arpías? Mal vamos Diego, mal vamos. Menos mil puntos. Que lo sepas. El gremio exige una rectificación pública. Sino atente a las consecuencias...